En su fase final avanza la construcción de 1.840 metros lineales del Dique Carreteble en Puerto Velero, Tubará, obra que permite proteger a más de 11 mil familias de esa subregión del departamento ante el riesgo de inundaciones, mitigando así los efectos del cambio climático y reduciendo la vulnerabilidad de la zona costera del Departamento.

Durante una visita de inspección de obras, Alberto Escolar Vega, director de la Corporación Autónoma Regional del Atlántico CRA, entidad ejecutora, explicó que los trabajos mejoran las condiciones ambientales y paisajísticas, así como reactivando la actividad turística de la zona de Puerto Velero.

Las obras cuentan con el concurso de Prosperidad Social y representan una inversión que supera los 10 mil millones de pesos, las cuales además de proteger las costas buscan  fortalecer la gestión del riesgo en el Atlántico.

Arroyo El Platanal, en Juan de Acosta

Por otra parte, con el mejoramiento de la capacidad hidráulica, las condiciones ambientales, estructurales y de paisajismo del arroyo Platanal, en el municipio de Juan de Acosta, la Corporación trabaja para reducir el riesgo de inundaciones y proteger comunidades de esa población.

Son 531 metros lineales que se canalizan, además de la construcción de tres box-coulvert, andenes y barandas protectoras que garantizan el desplazamiento y la seguridad de la comunidad. Los trabajos tienen una inversión por parte de la Corporación de dos mil millones de pesos.

Lago El Cisne, Puerto Colombia

El director de la autoridad ambiental departamento también supervisó las acciones adelantadas por la Corporación, mediante las cuales se intervienen 175 metros lineales de un total de 720 del canal alimentador del Lago El Cisne, así como obras para mejorar la sostenibilidad hídrica y la ronda de este cuerpo de agua, a través del retiro de sedimentos.

“Para la Corporación es de importancia estratégica la recuperación ambiental de los ecosistemas del departamento, y no desfalleceremos en ese propósito, con la formulación de iniciativas para proteger nuestro territorio y en especial la franja costera, dada su vulnerabilidad frente al cambio climático”, enfatizó Alberto Escolar.

“El Estado ha establecido nuevas funciones y responsabilidades a las autoridades ambientales, entre estas planificar la zona marino costera, identificar riesgos y mitigarlos, es una tarea ardua que demanda una atención especial en nuestra calidad de actores ambientales”, precisó Escolar Vega.